1.JUN.08 - POS.- 36 09 35 N 05 21 32 W TIME 00:00 LT

Los viajes del Irenea
Amancio Macia
Sun 1 Jun 2008 00:00

A las 13:30 salimos hacia Gibraltar y La Línea. Hay un viento de poniente, que nos viene por popa,  de casi 25 nudos, pero como solo tenemos que navegar unas doce millas, vamos a motor.

 

Tanto ayer como hoy estamos pasando esos puntos que tanto estudiamos para nuestros exámenes de patón: Tarifa, Punta Carnero, Punta Europa ... Nos impresiona la costa, algo salvaje, poco construida, con playas de arenas oscuras pero desiertas. Un sitio para volver.

 

La bahía de Gibraltar se aparece con cargueros fondeados por todas partes. Mercantes más pequeños se abarloan a los más grandes. El tráfico de feries es incesante. Balearia, Acciona, Trasmediterránea (pensábamos que ya no existía) y otros muchos nos cruzan por proa y popa.

 

Llegamos a Gibraltar, a la gasolinera del la marina del exterior de muelle principal. Una motora de Southampton se obstina en adelantarnos para estar primero en el muelle, con movimientos temerarios. El gasolinero de entrada nos habla en ingles (no será por el tamaño de nuestro pabellón), pero al momento cambia al castellano sin mayor problema. Su casetilla de cobrar es una especie de Duty Free donde vende licores, tabaco y otras mercaderías. Hacemos gas oil, y salimos para La Línea, que esta a la vuelta de la esquina, pasando la pista de aterrizaje de Gibraltar, la mitad en el mar, a la mitad cruzada por la carretera de acceso desde el paso fronterizo.

 

Llamamos por radio, y después de dos intentos, alguien nos dice literalmente que nos metamos donde nos de la gana. Así lo hacemos.

 

Tapeamos en la cantina del Club Maritimo Lienense, y luego sesteamos en el barco.

 

A las 19:30 horas salimos hacia el Mercadona a reponer últimas provisiones, mientras Antonio se queda en el barco limpiando las sentinas de aceite y reponiendo tapajuntas en la tapa de balancines. Al volver, nos encontramos a Antonio completamente ennegrecido por la tarea. Le echamos una mano a retirar el aceite, y cenamos en el propio Club.

 

Mañana iniciamos la última parte de nuestro viaje, de La Línea a Denia directamente. Bueno, no queda mucho, los pronósticos no son malos, pero en el mar nunca se sabe. Aún así, mirar hacia atrás, con más de 3.300 millas recorridas, y el horizonte de 360 millas, se antoja como tarea fácil. Ya veremos.