En navegación, entre Marina Rubicón (Lanzarote) y Marina Sansouci (Santo Domingo, Republica Dominicana)

Aquí seguimos. Como ya lo adelantamos, ayer fue un día muy bueno. La noche también. Navegando a más de 6 nudos, con el viento por la aleta de estribor. Con el génova sin atangonar. Noche clara, con algunas nubes de tamaño medio. La primera guardia, Caula y un servidor. Hablamos un poco al principio sobre los cambios de ánimo y la manera en que se expresan de múltiples maneras. Luego dormitamos a ratos. La segunda guardia, Mañas y Toño. Algunas nubes más grandes, que hacen un efecto contrario al supuesto, nos dejan parados. Para acabar, de nuevo la pareja inicial. Aunque hacemos buena marcha, a las 07:30 ya un poco nerviosos nos ponemos los dos a preparar la maniobra de spi. Cuando sube Antonio, vemos que seguimos a 7 nudos, así que no lo izamos por ahora. A las 09:30, spi arriba. El viento va calando ligeramente. Empezamos a dar rumbos cercanos al 300º. A las 11:30 trasluchámos, y con el spi más de través damos 265º y 6,5 nudos. Perfecto.

Antonio habla con Rafael de Castillo, y nos vuelve a confirmar lo que nos dijo ayer. Hoy 10 nudos, mañana de 5 a 10 nudos y el viernes sol y moscas. Bueno, si con lo que queda hoy y mañana avanzamos a buen ritmo, no hay problema en tener un día de calma. A las 17:00 horas el viento empieza a bajar substancialmente, y tenemos que arriar spi. Lo dejamos sobre la cubierta. Hay que ver las caras de todos. Si hoy era un día de los de avanzar!!!!. Que será el viernes. Pero en media hora vuelve algo de viento, y aquí estamos, spi arriba, a 4 nudos aproximadamente, rumbo 260º.

Jordi nos manda las posiciones de las 09:00 UTC, como imaginábamos ayer le ganamos al Acrobat y sobre todo a Pilar, que parece que ha tenido un mal día. Ya le llevamos 120 millas. Luego, al hablar con Rafael a las 16:00 horas UTC vemos que nos han recortado algo. Normal, el efecto “acordeón” de las calmas. Jordi también nos ha enviado algunas noticias. Informan que tenemos pensado arribar a Antigua a por agua (¿?). Nos planteamos entrar a por combustible, y seguir en open, si veíamos que no llegábamos en el tiempo limite. Pero decidimos no volver a pensarlo hasta el sábado, cuando comprobemos el avance de estos tres días, incluido el día de calma. Parece que el Acrobat también tiene pensado hacer una parad técnica.

Lectura, música, duchas en cubierta, coladas, alguna pequeña reparación. Sol y protector solar. Aves que se nos acercan y se van. Dos orcas (según Toño), o dos calderones (según Antonio) por popa, a menos de 300 metros. Algunas tertulias ligeras en cubierta, aunque el tema estrella, se lo pueden imaginar, son los cálculos de cuando llegamos. Las esposas de Mañas y el Sr. Font deben estar a punto de llegar a Santo Domingo. Y nosotros a 690 millas. La otra gran conversación, lo absurdo de esta regata, hecha en mala fecha, con un mal punto de salida, y un peor punto de llegada. Hay que aprender de los ingleses. Ya se que me repito. Pero si yo lo he escrito dos veces, piensen las de veces que lo he escuchado. A última hora pescamos un atún pequeño (1 kg. aprox.). Toño lo limpia con cuidado. Buena suerte, parece atún rojo. Mañana lo cataremos.

Hoy hemos seguido la indicaciones de la sobrina de Mañas, Mª Ángeles, y hemos ampliado nuestra dieta de legumbres, a ver si avanzamos algo más. El aperitivo ha sido de tostadas con foie, sardinillas en aceite y una ensalada de garbanzos con cebolla y pimentón. La comida, con el Sr. Font al mando ayudado por Toño ha consistido en una primera y necesaria incursión en conceptos minimalistas: macarrones dos salsas,  con napolitana de cebolla y 4 quesos (ambas de bote, pero por cierto, bastante buenas). Anoche cenamos crema de espárragos, salvo Mañas, que ceno un bocadillo de chorizo (con pan de pita recién tostado). Hemos hecho un gran zumo de limón azucarado (y edulcorado) para prevenir el escorbuto. Lo hemos bebido los seis en cubierta, a modo de ceremonia pagana de purificación. No teman por nosotros, que ya nos cuidamos.