Por fin hemos dejado atras las lluvias y Bahia nos recibe con una espectacular puesta de sol 

Han sido dos dias y medio con poco o nada de viento, excepto el ultimo, donde hemos podido apagar el motor y navegar a vela. Llegamos a las 2 de la madrugada a Salvador y otro fuerte chubasco (el penultimo) nos hace frenar a la entrada, para no llegar a la Marina calados hasta los huesos. No contestan por la radio y tampoco hay nadie en el pantalán, por lo que nos las arreglamos solitos y amarramos y nos vamos a dormir hasta bien entrada la mañana siguiente, que aquí son las 9, ya que el sol sigue saliendo a las 5 y cuarto.

En el centro el Elevador Lacerda, para subir a la ciudad alta por 0,15 R$.        Ciudad baja.

La llegada a Salvador siempre es entrañable ya que la marina donde estamos queda ubicada debajo de la Ciudad antigua, mas conocida como Pelourinho y las vistas son expectaculares. Y ello a pesar del mal estado de conservación de tan enorme patrimonio arquitectonico de los siglos XVI y XVII. Salvador de Bahia fue la primera ciudad que pasó a ser Capital de Brasil del imperio portugues y la segunda ciudad en importancia despues de Lisboa. Fue fundada en 1549, por encargo del rey a Tomé de Souza. Fue muy rica e importante gracias a la caña de azucar, el tabaco,  la ganadería y la mineria en piedras preciosas. Tambien lo fue tristemente por la gran afuencia de esclavos hasta tal punto que llegaron a ser la mitad de la población. Cuando se derrumbo la industria azucarera en 1763, la capitalidad de Brasil y de la corte se trasladó a Rio de Janeiro. Así la ciudad quedó estancada al desplomarse la economía agricola por falta de organización laboral y productiva. En la actualidad es la tercera ciudad de Brasil, se está industrializando, está atrayendo el turismo, pero da la impresión de ser una grandisima ciudad con un contraste grande entre zonas pobres y zonas ricas o acomodadas. A pesar de eso no deja de tener una gran belleza con playas preciosas y un ambiente bullicioso donde convivien la musica, las celebracines festivas, la gente y es la ciudad de Brasil donde existe el sincretismo africano, manteniendose no solo en las comidas, sino tambien en el culto a sus dioses africanos u Orixás.

Dejo unas cuantas fotos, otro dia, más.

Carmen.