En Navegación, entre Marsella y el Cabo de San Antonio.

Nos levantamos a las 08:00, hacemos unos últimos arranches en el barco, y a las 09:30 estamos en la bocana del Vieux Port de Marsella. Nuestra intención es dar rumbo al Cabo de San Sebastián. Si se da bien, nos planteamos hacer una pequeña recalada de unas horas en L’Escala para visitar a  nuestro amigo Caula. Pero dependemos de los vientos, que en algún momento van a ser de SW, justo en nuestra proa. Ahora vamos ciñendo, con 15  nudos de viento real, y haciendo cerca de 5 nudos de velocidad. El Irenea navega tranquilo y feliz.

Marsella nos ha gustado. Es una ciudad marinera por los cuatro costados, como Génova, como Cagliari, como Trapani. Toda la zona del Vieux Port y barrio antiguo (Le Panier) está en buen estado. Seguramente se ha hecho un esfuerzo extra por la capitalidad cultural. Como tantas ciudades, se ha trabajado mucho en abrir el frente del costa a la gente,  durante muchos años colonizado por actividad mercantil propia del mar. Intervención especialmente grande en la zona del Mucem y sus interconexiónes con el Fort St-Jaques y con Le Panier. Como siempre, no se ha llegado a todo (el edificio de la Bolsa, la zona de las Catedrales), pero se le está dando un buen empujón.

Visitamos también otras zonas (Notre Damme de la Garde, El Pharo, Course Julien, Le Canabier, etc.) Ayer domingo también nos adentramos por algunos barrios menos turísticos, y el ambiente cambiaba radicalmente. Disfrutamos de la gastronomía provenzal, aunque curiosamente hemos hecho muchas más comidas y cenas en el barco.

El CNTL está bien organizado, y aunque el puerto es muy grande (más de 1.000 amarres), y tiene muchas concesiones, es curioso que es casi el único que da amarres de transeúntes.