1.AGO.10 - POS.- 28 07 43 N 15 25 30 W TIME 22:30 LT (UTC - 1)

Amarrados en el Muelle Deportivo del Puerto de Las Palmas (Gran
Canaria). Siempre intentamos entrar a puerto con luz natural, pero las ganas
de llegar, el conocimiento del puerto por parte de Juan y Amancio, y su
amplitud, hacen que decidamos entrar de noche. Unas Al acercarnos a puerto cae la noche, y encontramos algo de tráfico.
Principalmente un gran remolcador, algunos cargueros fondeados, y un ferry
rápido que se nos acerca por estribor a 21 nudos. El remolcador cambia un poco
su derrota para no coincidir con nosotros y un carguero, pero luego se queda
cerca de bocana, sin entrar, esperando al práctico. Nosotros nos acercamos al
muelle exterior y a la verde, y por un momento parece que vamos a pasar antes
que él, pero al final el remolcador mete maquina y entra por delante de
nosotros. Nos acercamos al Muelle Deportivo, que es la zona de embarcaciones
de recreo dentro del puerto (además del Real Club Náutico). Llamamos
repetidamente por el canal 11, pero nadie contesta. Está gestionado
directamente por Puerto del Estado, y seguramente nadie trabaja en domingo por Por la mañana, Manuel y un servidor nos acercamos a la Capitanía
(lo que es un paseo serio) y hacemos el ingreso. Nos tenemos que mover al
pantalán R. Hacemos la maniobra con cierta dificultad por el viento (y porque
nos dan un amarre barlovento) y nos ponemos a desarranchar el barco. Juan se
sorprende del número de cabos y poleas que podemos llegar a baldear. Para comer
nos vamos a Casa Montesdeoca, en Vegueta. Nos gusta. Nos pasamos la tarde
vagueando y recogiendo cosas. Para cenar intentamos ir al Centro Gallego,
detrás del Hotel AC, pero está cerrado. Acabamos en una popular pulpería
“Casa Carmelo”, donde tapeamos papas, pulpo, lapas con mojo verde y
queso empanado. A la vuelta nos tomamos unos gin tonics en el Sailor’s
Bar del Muelle. El martes nos lo tomamos con calma. Quitamos y recogemos el génova,
y el piloto de viento. Comemos en otro restaurante de Vegueta. “Deliciosa
Marta”, que estaba recomendado en algunas revistas. Cocina moderna con
aires Mediterráneos (el cocinero se formó con alguno de los clásicos
de Catalunya). Tomamos tartar de salmón, esqueixada y foie para compartir. De
segundo presa Ibérica, paletilla de cordero, steak tartar y hamburguesa con
foie. Raciones grandes. Bien, pero no para echar cohetes. Por los menos nos
zampamos dos botellas del monovarietal Shiraz de Enrique Mendoza 2007, que
parece que vuelve por sus fueros. Por la tarde baldeamos el barco, y acabamos cenando algo en el
barco. No hace nada de calor, y el cielo está siempre encapotado y grisáceo.
Los de aquí lo llaman “Panza de Burro”. Es efecto de los vientos
del norte, estables por el anticiclón de las Azores, y que también nos han
traído hasta nuestro destino. No tenemos quejas. Parece ser que al pasar el
Aeropuerto, el cielo se vuelve de un azul intenso, soleado y luminoso. El miércoles 4 nos levantamos pronto, y vamos a lavar todas las
sabanas y toallas. A las 11:30 salimos del amarre hacia el pantalán de espera,
devolvemos las llaves, y nos llevamos el barco hacia el Arsenal, donde va a descansar
hasta finales de Octubre. Nos están esperando. Amarramos abarloados a uno de
los diques flotantes interiores, ayudados por la marinería; después de tomar
una cerveza, nos vamos al Hotel Madrid, donde Franco pernoctó antes de salir
hacia Marruecos en el Dragón Rapide. El hotel tiene una estrella, y Mateo se
queja un poco. Lo dirige la familia de los fundadores, y charlamos con Paco
(uno de los tres hijos) sobre la navegación, la hostelería y la crisis, con un
poco de guasa. Antes cenamos en una tasca recomendada por las guías de Mateo
(Cava de Triana) donde sencillamente somos los únicos comensales en toda El jueves 5 paseamos una vez más por Vegueta, vemos la catedral y
la Casa de Colón, y nos vamos para el aeropuerto. Acaba la primera parte de
nuestra aventura. La segunda entrega, en noviembre. Permanezcan atentos. Muelle Deportivo de 3 noches, 46,26 euros agua y luz incluidos (que son 13,39 euros) Amarrados en el Pantalán R. (Primera noche, nos abarloamos en el
pantalán T directamente) Llaves para entrar en los pantalanes, y en los bloques de duchas
(hay 3) que están trabajados pero bien (3 sobre 5) Buenas lavadoras y secadoras. Muy buenos comercios náuticos, y hostelería variada, incluido el
centro de ocio Sotavento. |